La lectoescritura no es un proceso natural, por lo tanto no se adquiere de manera espontánea, si nadie nos enseña a leer y escribir no aprendemos solos. Evolutivamente hablando, el ser humana utiliza la lectoescritura para comunicarse desde un periodo relativamente moderno, hace 4 siglos atrás leer y escribir no era una habilidad universal, por lo tanto el cerebro humano tiene que combinar habilidades (memoria visual, auditiva, lenguaje, comprensión, coordinación visomanual) para conseguir la lectura.
Ferreiro y Teberosky (1992) han creado una progresión del proceso en cinco fases. En las dos primeras fases el niño tiene una escritura indiferenciada, llamada así porque los niño aún no tienen conciencia fonémica y las grafías no se parecen a las letras, la forma de expresión "escrita" del niño son los dibujos y garabatos. En la primera fase visualmente diferencian letras de dibujos sin embargo para él niño escribir o dibujar es lo mismo. En este proceso, los niños formulan hipótesis intentando comprender cómo funciona la lectoescritura, las ponen a prueba y las aceptan y rechaza según los resultados que va obteniendo. Pero, además, es preciso el acompañamiento y guía por parte de un adulto.
1. Escritura indiferenciada:
Se le llama escritura indiferenciada porque las grafías realizadas por los niños aún no tiene la forma ni se parecen a las letras convencionales, son garabatos o dibujos. Harán el mismo garabato para dibujar algo que para escribir. Este proceso inicia en el momento en que los niños, visualmente pueden distinguir letras y números de dibujos o imágenes.
En esta etapa los niños no tienen conciencia fonémica, es decir que no saben que las letras representan sonidos.
Dentro de éste "momento" se puede distinguir 4 niveles de transición.
Nivel 1: Garabateo
Estas grafías no tienen linealidad, orientación ni control de cantidad, son garabatos que están por todas partes en el papel. Un garabato se caracteriza porque solo puede ser comprendido por el autor, no se pueden reproducir, no hay dos garabatos iguales,
Existen tres tipos de Garabatos:
Garabato innominado.- Realiza trazos por el placer de hacerlos, el garabato es el resultado del juego del papel con el instrumento (lápiz, marcador, bolígrafo) el niño aún no tienen la intención de representar algo con su garabato.
Garabato denotado.- cuando el niño primero realiza el garabato y luego le da un significado si el adulto le pregunta qué hizo el niño le dará significado, solo puede ser comprendido por el autor.
Garabato nominado.- el niño planifica lo que va a representar en su garabato “voy a dibujar mi casa” y realiza trazos y grafías que pueden ser caóticas y desordenadas cada una simboliza algo que sólo el niño entiende.
Posteriormente éstos garabatos demuestran mayor unidad, por ejemplo realizará un cuadrado y será su representación de “casa”.
Y en cuanto empiece a comparar su garabato con lo que pretende representar, éste tomará una forma más parecida, o intentará dibujar ideogramas (por ejemplo un cuadrado con triángulo para casa). Entonces dejan de ser garabatos para convertirse en dibujos.
Nivel 2: Dibujo
Conforme va aumentado el control motriz y el tono muscular el niño tiene mayor control en el uso del material con el que escribe o dibuja. La primera representación "escrita" del niño es el dibujo, porque sí tiene sentido mientras que las letras (que representan sonidos) es un concepto muy abstracto.
Inicialmente la actividad de escribir y dibujar para el niño es lo mismo.
Necesita del dibujo para significar su texto, es decir que si se le pide que escriba "casa" el niño hará una representación grafica de lo que para él es una casa.
Sólo puede ser leída por su autor.
Nivel 3: Imita el movimiento de escribir
El niño comprende que escribir es una actividad diferente a la de dibujar, esta consciente de que no sabe escribir y formulará varias hipótesis para descubrir cómo funciona la escritura.
Imita el movimiento de escribir
Comienza a organizar las grafías una a continuación de la otra (linealidad). Estas pueden ser círculos, puntos, arcos, bucles, puntas u otros. En sí las grafías están organizadas, por el hecho de que el niño observa cómo escriben los adultos y cómo son las letras y trata de imitar éste movimiento pero aún sus trazos no se parecen a las letras.
Cuando se le pide que escriba, él dirá que no sabe escribir pero sí puede dibujar e intentará copiar algunas letras.
En este momento también memorizan la forma de las letras de su nombre, se podría decir que pueden "dibujar su nombre" pues aún no distinguen el sonidos de las letras individualmente.
Nivel 4: Copia letras sin conciencia fonémica.
Imitan las letras que ven, copiando de un modelo, pero sin tener conciencia Fonemica es decir que no saben el sonido de cada letra, dibujan de memoria la forma de letras que recuedan. Hay mayor definición en los rasgos. Los niños trabajan dos hipótesis:
Hipótesis de cantidad: Las palabras escritas deben tener un mínimo de tres letras.
Hipótesis de variedad: No puede haber dos letras iguales en una misma palabra, las grafías deben ser diferentes entre sí ("letras iguales no sirven").
Escritura diferenciada:
1. Hipótesis Pre-silábica:
Comprende y lee las palabras como un todo, hacen la asociación Grafema-Fonema de las las 5 vocales: A E I O U.
2. Hipótesis silábica:
Comienzan a establecer relaciones entre los sonido de las letras de una palabra y las vocales. Identifican la sílaba, pero suelen representarla con una sola letra normalmente vocal, que para ellos tienen mayor sonoridad.
Una letra tienen el valor sonoro de una sílaba, por ejemplo se le pide que escriba PATO y escribe
A O la A para él sonará como PA, y la O como TO.
3. Hipótesis silábica- Alfabética:
Es una etapa de transición, establecen correspondencias entre las sílabas y lo que escriben, pero no son capaces de segmentar todos los elementos sonoros de la palabra, lo que hace que dejen sin escribir algunas letras.
Algunas letras mantienen el valor silábico- sonoro, mientras que otras no.
Conviven ambas hipótesis en una misma escritura: por ejemplo se le pide que escriba PELOTA y escribe PLOTA ya reconoce el fonema de la L y la T pero no el de la P.
4. Hipótesis Alfabética
Reconocen una correspondencia alfabética a cada letra tanto consonantes como vocales, aunque aún debe aprender la combinacion de sonidos para lograr la lectura.
En la quinta fase el niño hace correspondencia entre el fonema y el grafema por eso es llamada fase alfabética. Esta fase no es el final del proceso puesto que quedan por resolver muchas dificultades que se pueden presentar con la comprensión del sistema, en la sintaxis y la ortografía.
Ferreiro destaca que el proceso de alfabetización inicial tiene como componentes el método utilizado, la madurez-prontitud del niño y la conceptualización del objeto que se puede dar de dos modos: como representación del lenguaje o como código de trascripción gráfica en unidades sonoras, cuando la conceptualización es de este tipo tiene una consecuencia pedagógica que es la ejercitación de la discriminación y la adquisición de una técnica en oposición a la comprensión de la naturaleza del sistema de representación del lenguaje.