domingo, 18 de agosto de 2019

Para el albúm de etiquetas

Álbum de etiquetas.


El material didáctico que ustedes van a elaborar corresponde a la lectura perceptiva y esta dentro del enfoque de lectura globalizada. En la etapa de lectura perceptiva, el niño reconoce los colores, las formas y el contexto de lo que esta escrito e identifica la palabra como un todo como si fuera un dibujo. Por ejemplo, el niño no sabe leer pero puede reconocer la etiqueta de “Coca Cola” basándose en la forma y color de la misma.

Al hablar de lectura "perceptiva" entendemos que debe partir de algo con lo que el niño haya tenido un contacto previo, es decir, debe ser algo que a él le interese, así pues podrá reconocer el nombre de su programa favorito y no  el de un banco, por ejemplo, pues esto último es algo que no le interesa.  

Este material didáctico parte de lo conocido y familiar para el niño para llegar a lo nuevo: reconocer las letras como signos individuales, asociar las letras que están en las etiquetas con letras normales para memorizar sus grafemas. Ayudarles a comprender que cada palabra esta conformada por letras. Sirve de introducción a la lectura.

Para que éste material funcione adecuadamente, debe cumplir las siguientes condiciones:

La etiqueta o logo debe ser familiar para el niño, es decir que el niño nombre el producto por lo que esta escrito en la etiqueta, por ejemplo si en la etiqueta dice “Fanta” y el niño le llama así, esa etiqueta sirve. Si por otro lado la etiqueta dice “Garoto” y el niño lo llama “Chocolate” esa etiqueta no sirve.

Evitar etiquetas o logos cuya pronunciación sea en otro idioma, “Sprite” por ejemplo en español se lee diferente al nombre que todos pronunciamos.

Es indiferente si usamos letras mayúsculas o minúsculas, lo importante es tener orden en la elección, si queremos hacer las tarjetas en mayúsculas, que todas sean así.

Si usamos etiquetas reales, tener cuidado con que estén enteras, limpias y no muy arrugadas, lo que interesa es la parte escrita, no tanto lo demás.

No aislar los elementos que acompañan el texto, si las letras tienen dibujos o imágenes cerca pueden dejarlas, éstas también sirven de referencia para los niños. Por ejemplo la ardilla al lado del logo de “Nusita” no la vayan a quitar.

No usar etiquetas con el texto muy pequeño o difuso, las letras debe ser legibles e identificables.
Pueden obtener imágenes de internet, siempre y cuando sean de alta resolución, los colores estén bien definidos, sean de nuestro contexto (no de otros países) y evitar que sean sólo texto sino que estén acompañadas de alguna imagen de referencia.

La tarjetas con el texto deben estar correctamente escritas, letras grandes y no estilizadas, si las realizan a mano, deben estar legibles, del mismo tamaño y no contener errores ni tachones.

Pueden utilizar cartulina de colores pero que no haya relación entre el color de la tarjeta con la etiqueta del texto, luego el niño no asocia texto sino colores. Utilicen un solo color para todas o colores aleatorios.

Modo de uso.
Se le muestra la tarjeta que contienen la etiqueta, y le preguntamos al niño o niña, “¿de qué es esta etiqueta?” o “¿qué dice aquí?” el niño responderá, luego se le muestra el texto que dice lo mismo con letras neutrales. Y le señalamos cada una nombrando la letra por el fonema.
Luego le mostramos otra etiqueta y así, repetimos éste proceso con máximo 5 etiquetas.
Luego las mezclamos con sus nombres y dejamos que el niño las asocie, etiqueta con su nombre.
El objetivo es que comprenda que cada palabra esta compuesta de letras y sea capaz de recordar los grafemas de cada una y sus diferentes presentaciones. (Minúscula, mayúscula, imprenta, carta).

Etapas del desarrollo de la escritura

La lectoescritura no es un proceso natural, por lo tanto no se adquiere de manera espontánea, si nadie nos enseña a leer y escribir no  aprendemos solos. Evolutivamente hablando, el ser humana utiliza la lectoescritura para comunicarse desde un periodo relativamente moderno, hace 4 siglos atrás leer y escribir no era una habilidad universal, por lo tanto el cerebro humano tiene que combinar habilidades (memoria visual, auditiva, lenguaje, comprensión,  coordinación visomanual) para conseguir la lectura.
 Ferreiro y Teberosky(1992) han creado una progresión del proceso en cinco fases. En las dos primeras fases el niño tiene una escritura indiferenciada, llamada así por que las grafías aún no se parecen a las letras, y la forma de expresión del niño son los dibujos. En la primera fase visualmente diferencian letras de dibujos sin embargo para él niño escribir o dibujar es lo mismo. En este proceso, los niños formulan hipótesis, las ponen a prueba y las aceptan y rechaza según los resultados que va obteniendo. Pero, además, es preciso el acompañamiento y guía por parte de un adulto.

1. Escritura indiferenciada:
Se le llama escritura indiferenciada porque las grafías realizadas por los niños aún no tiene la forma ni se parecen a las letras convencionales, son garabatos o dibujos. Harán el mismo garabato para dibujar algo que para escribir. Este proceso inicia en el momento en que los niños, visualmente pueden distinguir letras y números de dibujos o imágenes.

Dentro de éste "momento" se puede distinguir 4 niveles de transición. 
Nivel 1:
Estas grafías no tienen linealidad, orientación ni control de cantidad, son garabatos que están por todas partes en el papel.

Existen tres tipos de Garabatos:

Garabato innominado.- Realiza trazos por el placer de hacerlos, el garabato es el resultado del juego del papel con el instrumento (lápiz, marcador, bolígrafo) el niño aún no tienen la intención de representar algo con su garabato.

Garabato denotado.- cuando el niño primero realiza el garabato y luego le da un significado si el adulto le pregunta qué hizo el niño le dará significado, solo puede ser comprendido por el autor.

Garabato nominado.-  el niño planifica lo que va a representar en su garabato “voy a dibujar mi casa” y realiza trazos  y grafías que pueden ser caóticas y desordenadas cada una simboliza algo que sólo el niño entiende.
Posteriormente éstos garabatos demuestran mayor unidad, por ejemplo realizará un cuadrado y será su representación de “casa”.
Y en cuanto empiece a comparar su garabato con lo que pretende representar, éste tomará una forma más parecida, o intentará dibujar ideogramas (por ejemplo un cuadrado con triángulo para casa). Entonces dejan de ser garabatos para convertirse en dibujos. 


Nivel 2:
Conforme va aumentado el control motriz y el tono muscular el niño tiene mayor control en el uso del material con el que escribe o dibuja. La primera representación "escrita" del niño es el dibujo, porque  sí tiene sentido mientras que las letras (que representan sonidos) es un concepto muy abstracto.
Inicialmente la actividad de escribir y dibujar para el niño es lo mismo. 
Necesita del dibujo para significar su texto, es decir que si se le pide que escriba "casa" el niño hará una representación grafica de lo que para él es una casa.

Sólo puede ser leída por su autor.

Nivel 3: 
El niño comprende que escribir es una actividad diferente a la de dibujar, esta consciente de que no sabe escribir y formulará varias hipótesis para descubrir cómo funciona la escritura.
Imita el movimiento de escribir

Comienza a organizar las grafías una a continuación de la otra (linealidad). Estas pueden ser círculos, puntos, arcos, bucles, puntas u otros. En sí las grafías están organizadas, por el hecho de que el niño observa cómo escriben los adultos y cómo son las letras y trata de imitar éste movimiento pero aún sus trazos no se parecen a las letras.

Cuando se le pide que escriba, él dirá que no sabe escribir pero sí puede dibujar e intentará copiar algunas letras.

En este momento también memorizan la forma de las letras de su nombre, se podría decir que pueden "dibujar su nombre" pues aún no distinguen el sonidos de las letras individualmente.

Nivel 4:
Imitan las letras que ven, copiando de un modelo, pero sin tener conciencia Fonemica es decir que no saben el sonido de cada letra, dibujan de memoria la forma de letras que recuedan. Hay mayor definición en los rasgos. Los niños trabajan dos hipótesis:
Hipótesis de cantidad: Las palabras escritas deben tener un mínimo de tres letras.

Hipótesis de variedad: No puede haber dos letras iguales en una misma palabra, las grafías deben ser diferentes entre sí ("letras iguales no sirven").

Escritura diferenciada:

1. Hipótesis Pre-silábica: 
Comprende y lee las palabras como un todo, hacen la asociación Grafema-Fonema de las las 5 vocales: A E I O U.

2. Hipótesis silábica: 
Comienzan a establecer relaciones entre los sonido de las letras de una palabra y las vocales. Identifican la sílaba, pero suelen representarla con una sola letra normalmente vocal, que para ellos tienen mayor sonoridad.
Una letra  tienen el valor sonoro de una sílaba, por ejemplo se le pide que escriba PATO y escribe
A O la A para él sonará como PA, y la O como TO.

3. Hipótesis silábica- Alfabética:  
Es una etapa de transición, establecen correspondencias entre las sílabas y lo que escriben, pero no son capaces de segmentar todos los elementos sonoros de la palabra, lo que hace que dejen sin escribir algunas letras.
Algunas letras mantienen el valor silábico- sonoro, mientras que otras no.
Conviven ambas hipótesis en una misma escritura: por ejemplo se le pide que escriba PELOTA y escribe PLOTA ya reconoce el fonema de la L y la T pero no el de la P.

4. Hipótesis Alfabética 
Reconocen una correspondencia alfabética a cada letra tanto consonantes como vocales, aunque aún debe aprender la combinacion de sonidos para lograr la lectura.
En la quinta fase el niño hace correspondencia entre el fonema y el grafema por eso es llamada fase alfabética. Esta fase no es el final del proceso puesto que quedan por resolver muchas dificultades que se pueden presentar con la comprensión del sistema, en la sintaxis y la ortografía.
Ferreiro destaca que el proceso de alfabetización inicial tiene como componentes el método utilizado, la madurez-prontitud del niño y la conceptualización del objeto que se puede dar de dos modos: como representación del lenguaje o como código de trascripción gráfica en unidades sonoras, cuando la conceptualización es de este tipo tiene una consecuencia pedagógica que es la ejercitación de la discriminación y la adquisición de una técnica en oposición a la comprensión de la naturaleza del sistema de representación del lenguaje.


viernes, 16 de agosto de 2019

Libro Aprender a Leer de las ciencias cognitivas al aula


Ya arreglé el problema, ahora sí se podrá abrir el PDF.
Hagan clic en el título del Libro: 


Stanislas Dehane

Adquisición de la Lectura

¿Cuál es la relación entre el lenguaje y la lectura?


El cerebro de un bebé está programado para el aprendizaje de una lengua. Eso significa que al bebé no hay que enseñarle a hablar una lengua; es un proceso natural. Los bebés aprenden a hablar desde  el parto. Es una habilidad sumamente compleja pero, como es natural, no somos conscientes de todo lo que implica. A diferencia del aprendizaje de una lengua, el aprendizaje de la lectura no es natural. No aprendemos a leer espontáneamente, alguien tiene que enseñarnos. 


Los elementos necesarios para lograr la lectura son: 


Tener el lenguaje oral


Si no somos capaces de hablar el idioma y tener el lenguaje oral es imposible lograr la lectura o escritura del mismo, hablar una lengua ya es una actividad compleja, leer y escribir en ella más aún, porque requiere otros elementos que los especificamos a continuación.   


La conciencia fonémica.- reconocer los sonidos que conforman el lenguaje. (fonemas)


Aquí es donde comienza el aprendizaje de la lectura. La conciencia fonémica significa que los niños toman conciencia de que el habla está compuesta por sonidos individuales. Debido a que es una parte crítica de la "preparación para la lectura ", suele ser uno de los puntos clave de los programas de enseñanza temprana. No obstante, dado que la escritura no es equivalente al habla, la conciencia fonémica por sí sola no es suficiente para que los niños aprendan a leer. Para que puedan aprender a leer, los niños deben ser capaces de reconocer que las marcas que se ven en el papel representan los sonidos de una lengua. Esas marcas, por supuesto, son las letras.


Conciencia alfabética.- Reconocer las letras del alfabeto. (grafemas)


Es más que la simple memorización del abecedario. El aprendizaje del abecedario es parte de la preparación para la lectura pero, para poder leer, los niños deben ser capaces de hacer más que simplemente memorizar las letras. También deben ser capaces de identificar qué sonidos de la lengua (fonemas) corresponden con cuáles letras. La memorización de las letras y los sonidos es un proceso más difícil que la memorización de los nombres de los objetos, como los animales. Los animales son entes concretos: pueden verse y dibujarse. Pero los sonidos no pueden dibujarse, las letras por sí mismas son mucho más abstractas que las imágenes por lo que el proceso de memorizar qué sonidos se corresponden con cuáles letras es más complejo que el proceso de memorizar los nombres de los objetos. Es por eso que se asocia imágenes con letras por ejemplo G  con la imagen de un Gato o la A de árbol..


La memorización de los sonidos que se corresponden con las letras del abecedario es aún más difícil cuando comprendemos que no hay una correlación exacta entre las letras y los sonidos de la lengua, por ejemplo letras que tienen dos fonemas como la C o la G, incluso las combinaciones de sonidos Gui Gi, h, y, ch, etc.  


La conciencia de la transformación de sonidos en letras: 


Unión de las dos conciencias anteriores, saber cómo se lee. Asociación grafema-fonema.


Dijimos que leer es la capacidad de interpretar las letras en sus fonemas, sin embargo estas combinaciones forman nuevos sonidos, no leemos pppppaaaappppppaaa sino papá uniendo las sílabas. Por más difícil que sea relacionar todos los sonidos con las letras correctas y memorizar todo eso, el aprendizaje lector exige aún más. Los niños también deben ser capaces de asociar las palabras impresas con los sonidos. Esta conexión entre los sonidos y la palabras impresa es tan compleja que aún no se sabe de qué forma los niños son capaces de realizarla. Pero cuando lo logran, decimos que han "descifrado el código". Y lo que sigue es hacer que comprendan las sonidos compuetos por la combinación de diferentes letras por ejemplo las sílabas trilíteras, PR, PL, TR, CR, CL,FR, FL, etc.


Las etapas del aprendizaje de la lectura


Al igual que el aprendizaje de una lengua, el aprendizaje de la lectura se da en etapas. Aunque no hay consenso acerca del modo en que evolucionan esas etapas, mucho depende de los estímulos que recibe el niño en su medio, porque como dijimos, la lectura no se produce de manera espontánea, el niño no aprende a leer si nadie le enseña.


Fase prealfabética.- las palabras como un todo, por la forma color y contexto.


En esta etapa, los niños fundamentalmente reconocen y recuerdan las palabras por su forma. Las palabras son como dibujos y las letra y el contexto en el que están escritas dan pistas acerca de cuál es la palabra. Por ejemplo, un niño puede “leer” las etiquetas, logos, letreros de algunos lugares asociándolos por lo que son y dónde están escritas, es aquí donde entra el método de las etiquetas, el niño lee la palabra por su forma total, poco a poco irá distinguiendo las letras. 


Fase alfabética parcial.- distingue el sonido inicial de las palabras 


En esta etapa, los niños son capaces de memorizar las palabras impresas al relacionar una o más letras con los sonidos que oyen cuando se pronuncia la palabra. Eso significa que pueden reconocer los límites de las palabras en papel y, por lo general, las letras del comienzo y posteriormente del final, en el caso de las consonantes aún dirá el sonido de la sílaba completa, por ejemplo con qué empiezan la palabra Pato ellos dirán con la PA. Las láminas con dibujos y letras sirven mucho en ésta etapa. 


Fase alfabética completa.- conoce las letras del alfabeto. 


En esta etapa, los niños han memorizado todos los sonidos representados por las letras y son capaces de leer las palabras gracias a que reconocen y separas cada letra de la palabra y el modo en que todos los sonidos representados por esas letras se unen para formar palabras. Reconocen y diferencian letras de otros símbolos. Sin embargo aún leen de manera silábica y desconocen algunas combinaciones fonémicas. 


Fase alfabética consolidada.- descifra el código alfabético, saber leer. 


Cuando alcanzan esta fase, los niños ya son conscientes de las secuencias de múltiples letras que se encuentran en las palabras que conocen y distinguen palabras con sonidos semajantes, y otras combinaciones como las sílabas trilíteras, y letras con doble fonema. 


En vez de mirar cada una de las letras de estas secuencias, almacenan todo el grupo de sonidos en la memoria como un único sonido. Esta clase de agrupamiento se llama "morfema". Este proceso les permite a los niños aprender palabras con mayor velocidad y eficiencia porque no tienen que considerar cada letra por separado, una a la vez sino reconocen la palabra entera por su forma.


Cuando son capaces de reconocer una cantidad suficiente de palabras con una rapidez y facilidad relativas, están listos para pasar de la lectura de palabras individuales a la lectura de oraciones y, más tarde, párrafos. A esta altura, pueden comenzar a concentrarse en la comprensión de lo que están leyendo. La mayoría de los niños alcanzan esta etapa durante el transcurso del tercer grado. (8 años)